Fuente. Depuertoplata.comPor: Anny Mariel
Por segunda ocasión y por vez primera en Puerto Plata, el también conocido como “emperador de la salsa” ofreció un concierto con un recorrido musical de canciones sacra, además de entonar temas de su producción discográfica navideña y otras que forman parte de su repertorio musical, incluyendo “Frio frio”, de su segundo disco homenaje a Juan Luis Guerra.
Con el aplauso de los presentes el artista demostró el gran el talento y capacidad escénica que posee llevando al público hacia un agradable recorrido de ritmo y sabor tropical, a través de interpretaciones como “Navidad en mi país”, “Mi burrito sabanero”, “Blanca Navidad”, entre otros.
Un momento destacado del concierto fue cuando el cantante exhortó a todos a buscar de Jesucristo, ya que según lo expresó ha sido la satisfacción más grande que haya podido recibir”.
Agradeció también a la Iglesia Buen Samaritano por invitarle a la República Dominicana y permitirle cantar a Dios públicamente por segunda ocasión en su carrera musical, razón por la cual se confesó muy nervioso, pero plenamente feliz.
Durante el concierto pudo verse un público variado compuesto por niños, jóvenes y adultos, incluyendo a la esposa e hija del artista, que disfrutaron el show coreando junto a Marlon todas las canciones de la noche.
Al finalizar el concierto los seguidores del salsero pudieron tomarse fotos y adquirir sus discos, los cuales también pudieron ser autografiados por el intérprete.
Con el aplauso de los presentes el artista demostró el gran el talento y capacidad escénica que posee llevando al público hacia un agradable recorrido de ritmo y sabor tropical, a través de interpretaciones como “Navidad en mi país”, “Mi burrito sabanero”, “Blanca Navidad”, entre otros.
Un momento destacado del concierto fue cuando el cantante exhortó a todos a buscar de Jesucristo, ya que según lo expresó ha sido la satisfacción más grande que haya podido recibir”.
Agradeció también a la Iglesia Buen Samaritano por invitarle a la República Dominicana y permitirle cantar a Dios públicamente por segunda ocasión en su carrera musical, razón por la cual se confesó muy nervioso, pero plenamente feliz.
Durante el concierto pudo verse un público variado compuesto por niños, jóvenes y adultos, incluyendo a la esposa e hija del artista, que disfrutaron el show coreando junto a Marlon todas las canciones de la noche.
Al finalizar el concierto los seguidores del salsero pudieron tomarse fotos y adquirir sus discos, los cuales también pudieron ser autografiados por el intérprete.
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