Por José Zabala
New York-Por primera vez después mucho tiempo, en la ciudad de New
York no se había visto una invasión de tantos artistas dominicanos
tratando de conquistar la plaza. Salseros, Bachateros, Merengueros,
Música Urbana (Dembow ), Mamberos y otros que no sabemos que es lo
que cantan, andan como chivos sin ley queriendo alcanzar un pedazo del
pastel musical en momentos de graves problemas económicos que arropa
a la comunidad Dominicana.
La falta de interés de algunos artistas, en analizar por qué están
teniendo tan baja asistencia a sus presentaciones, no cuestionan a sus
managers, no se preocupan por saber los lugares donde se presentarán,
y solo les interesa el negocio de una sola noche y punto. Esto está
provocando que muchos estén fracasando en sus presentaciones en la
ciudad de New York.
Algunos artistas o grupos que se presentan ciertos negocios, que sin
estar “pegados” y solo por el nombre conocido, exigen una tarifa muy
por encima de su costo real, argumentando, que otro centro de
diversión de la misma área lo puede contratar primero.
El mal proceder del artista y/o grupo, del vendedor y algunos
terceros, envueltos en la negociación, definen en determinados casos
un acuerdo a su conveniencia, de la hora establecida para que se
presente el show, perjudicando a los posibles asistentes a esos
establecimientos en esa noche.
Estos problemas van condicionando un ambiente desfavorable para los
clubes nocturnos, que se ven obligados a abrir las puertas más tarde
de lo previsto, y a veces, crear las condiciones para permitir la
contratación de un DJ para la animación, en lo que transcurre la
espera del “famoso” grupo, y de esa forma tratar de retener sus
clientes.
Otro problema es la presentación de un artista ó grupo en una misma
área, casi todos los días, con una publicidad agresiva, devalúa al
artista o grupo musical, aún con un nombre establecido, y sin embargo,
los managers del grupo y algunos establecimientos asumen la
responsabilidad de presentar el grupo y con una tarifa excesiva, muy
lejos de ser razonable . Algunos dicen que es por la competencia
comercial de los Clubes o Lounges.
El tiempo que permanece el grupo musical ó el artista en la tarima,
cuando ya ha sido establecido previamente en el contrato, a veces, dos
horas, en otro caso una hora; pero penosamente en algunos casos
cuando el grupo está realmente “pegado”, quizás tiene dos bailes en
una misma noche, ese establecimiento es el más afectado, que permite
que el grupo toque de 45 minutos, y a veces hasta media hora. Y eso va
en perjuicio de los clientes y el negocio.
Los clientes están pasando por un proceso que al final terminan
cansándose de vivir estas experiencias negativas y sobretodo, el más
perjudicado es el artista y algunos centros de diversión de buen
estatus que tendrán que desaparecer por la falta de clientes.
En estos tiempos de alta competencia, sobre todo en la música, donde
el artista se debe a su público y a los centros de diversión que lo
contratan; el artista debe ser capaz de garantizar el éxito de sus
presentaciones, y de no ser así: Que pasará con nuestros artistas en
la plaza neoyorkina?
No estoy bromeando, pero el artista debe enfocarse personalmente en
cuidar de su público, en caso contrario, las consecuencias negativas
no se harán esperar y el público se irá desencantando poco a poco, y
de paso, les digo a los artistas, que no se quejen de los DJs diciendo
que estos se quieren “robar el show” y que se quieren considerar
estrellas del momento. Artistas atiendan su cartón!!!
No hay comentarios:
Publicar un comentario