Altitaje

Elizabeth, agosto 24, 2014.

Doctor
Juan Manuel Santos,
Presidente de Colombia.

Palacio de Nariño,
Carrera 8 No. 7-26
Santa Fé de Bogotá, Colombia.

Estimado Señor Presidente:

En nombre de los comerciantes de la ciudad de Elizabeth, una de las ciudades con mayor concentración de compatriotas colombianos en el área de New Jersey, que aunque lejos de nuestra patria querida, trabajamos día a día con empuje y energía para contribuir con el progreso, no solamente de la comunidad colombiana en el exterior y nuestras familias, sino también para contribuir a que nuestra patria avance por la ruta del progreso, de la equidad y de la paz.

Como comunidad de comerciantes colombianos, levantamos nuestra voz de protesta en contra del abuso y atropello del que está siendo víctima la Dra. Elsa Gladys Cifuentes A., cónsul general de Colombia en New York. Es inconcebible que una funcionaria del gobierno que se ha distinguido siempre por su honestidad, servicio a la comunidad y amor incondicional por nuestra patria y compatriotas, sea víctima de estas manipulaciones políticas que no sólo atentan contra su buen nombre, sino que a la vez, vienen a desestabilizar una comunidad emprendedora que cree y valora el servicio social que la Dra. Elsa Gladys Cifuentes ha desempeñado durante los años en que ha ejercido como cónsul general de Colombia en la ciudad de New York.

Hemos conocido a la Dra. Elsa Gladys desde que empezó sus funciones como cónsul, hace ya tres años, cuando no contábamos aún con un consulado en el estado de New Jersey. Aunque hace ya dos años contamos con el consulado de la ciudad de Newark, somos un promedio de 150.000 compatriotas de los cuales muchísimos continuamos utilizando los servicios del consulado de New York, ya sea por costumbre, cariño o conveniencia. Muchos de nosotros consideramos aún el consulado de New York, nuestro consulado y a la cónsul Elsa Gladys Cifuentes, nuestra cónsul.

Las acusaciones de las que La Dra. Elsa Gladys ha sido víctima y últimamente la sanción disciplinaria que finalizó con la suspensión por un mes de su cargo, no puede más que despertar una oleada de indignación, incredulidad y desasosiego en esta población que conoce y vive día a día la excelente labor que la cónsul desempeña. No queda más que alzar nuestra voz y al unísono pedirle, Señor Presidente, que ponga un alto a tanto abuso, politiquería, e injusticia.

Confiamos en usted, y creemos que eso quedó perfectamente demostrado en las pasadas elecciones, cuando nuestra comunidad depositó su confianza en su gobierno y administración. No nos deje solos en este momento en que tanto lo necesitamos. Estamos reiterando el voto de confianza que tenemos en usted. Usted le ha apostado a La Paz y nosotros también. Queremos que esa paz comience en nuestra casa, que es nuestro consulado. No se puede construir un país de paz sobre cimientos de injusticia en contra de una persona honorable y limpia, ni en contra de una comunidad que necesita que nuestra cónsul pueda continuar por más tiempo su inmejorable desempeño.

Con todo el respeto que usted nos merece, esperamos más que una respuesta, una acción justa y pronta.

Cordialmente,

Roberto García, cc. 16'594.813
ROBERT JOYERÍA